• Por ello los políticos no usan sistemas ecológicos para su destrucción y la dejan en terrenos abiertos

Por Víctor Sánchez Baños

Los residuos y la basura, en general, se han convertido en un asunto de seguridad nacional, ya que millones de toneladas no encuentran un depósito definitivo y los gobiernos no aceptan un mecanismo para el uso ecológico de esos desperdicios.

En pocas palabras son un severo detonante de enfermedades y contaminación de aire, aguas y suelo.

De acuerdo con el diagnóstico básico para la gestión integral de los residuos del 2012 realizado por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, y el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, en México se generan 102,895 toneladas al día de residuos sólidos urbanos. De estos, 62,288 toneladas al día, es decir, el 60.54% se dispone de manera final en un relleno sanitario y un sitio controlado. Otras 9,904 toneladas al día que representan el 9.63%, v a ser recicladas, es decir, 30,703 toneladas al día que representan el 29.83%, son depositadas en tiraderos a cielo abierto y en el peor de los casos no son recolectadas.

La recolección de la basura implica un costo muy elevado para las finanzas públicas, pero es un negocio que deja mucho dinero para quienes se dedican a la pepena. Por ello, los gobiernos deben aplicarse a utilizar los desechos y convertirlos en energía, por una parte, y reusar el resto de los desperdicios con otros fines ecológico.

Hay la tecnología, pero no la quieren usar los políticos debido a que la basura es un negocio que les deja mucho dinero y el control de los pepenadores.

EN SUMA: Los efectos negativos sobre la economía mexicana de la salida de Reino Unido de la Unión Europea, poco a poco se van estabilizando. El dólar y la Bolsa, retornan a sus niveles “normales”.

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