Por Víctor Sánchez Baños

 

El presidente Andrés Manuel López Obrador, desde su campaña, anunció la creación de 100 nuevas universidades con el objetivo de que ningún joven se quede sin educación superior. ¿Quién podría estar en contra de una medida tan noble?: educación para todos. Claro, nadie.

Desde diciembre ya se habló de recursos que se destinarán para esa “noble acción de gobierno”. AMLO dijo que destinaría un mil millones de pesos para la creación de esas 100 nuevas universidades. O sea, que cada una, en promedio recibiría 10 millones de pesos anuales o la friolera de 833,333 pesos por universidad al mes.

Vamos al detalle. Una universidad se ubica en un inmueble que si se compra costaría unos 20 millones de pesos, en promedio, en zonas nada caras e incluso en zonas agrícolas. Además, necesitan de personal de administración, limpieza y seguridad. Según especialistas en universidades, por cada 100 alumnos se necesita invertir en 17 empleados administrativos, con un salario promedio de 10 mil pesos mensuales. Además, se necesitan maestros, que por cada 100 alumnos necesitarían 25 maestros de diferentes disciplinas con salarios que se ubicarían en los 15 mil pesos mensuales. Claro, todos ellos mal pagados a pesar del sacrificio de su preparación y actividad académica.

Por cada 100 alumnos se necesitan 42 personas cuyo cargo iría al presupuesto. En promedio, si se gasta en una renta de 10 mil pesos por el inmueble; demás de 42 personas contratadas para la actividad universitaria (que va desde la cátedra, investigación y servicios generales administrativos). En total unos 630 mil pesos mensuales. Esto, claro, si la universidad se localiza en zonas agrícolas. Si se va a las zonas urbanas, el precio se dispararía al doble.

Esto significa que si fueran 100 alumnos por cada universidad, en total serían 10 mil estudiantes (muy pocos). Cada alumno costaría 100 mil pesos anuales. Mejor pagarles matrículas en escuelas de paga.

poderydinero.mx

vsb@poderydinero.mx

@vsanchezbanos