Por Víctor Sánchez Baños
La responsabilidad del equipo del equipo mexicano en el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica, no es sólo defender lo logrado en la versión de 1994, sino de mejorarlo. Ken Smith, el líder de los negociadores mexicanos, experimentado en el manejo de pactos comerciales, especialmente en los ramos agrícola y maquilador, tiene una visión general de nuestras metas de crecimiento económico en base al comercio.
El TLCAN, dejó buenos dividendos al país y la renegociación del mismo, impulsada por el presidente Donald Trump, es una oportunidad para nuestro país para mejorarlo y fortalecerlo, especialmente, en el sector agrícola donde poco a poco tomamos más mercado en Estados Unidos y Canadá.
A diferencia de las negociaciones de inicios de los 90s, hoy una buena parte de los mexicanos haremos un puntual seguimiento de las negociaciones a través de las redes sociales. Son más ojos y más críticos, por lo que los negociadores tienen un margen más limitado de aprobar algo que dañe al país.
Durante 1992 y 1993, durante la negociación del TLCN los gobiernos de Carlos Salinas por México, George Bush, por Estados Unidos, y Brian Mulroney, de Canadá, lograron acuerdos en los que en términos generales beneficiaron al país. Acabaron con una isla llamada México para incursionar a la globalización que dio puerta de salida a mercancías mexicanas. Ojalá y los nuevos negociadores no entreguen la plaza.
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@vsanchezbanos
