- En 2015 se incrementaron 13%; transportistas principales víctimas
Por Víctor Sánchez Baños
Las carreteras se convirtieron en los lugares predilectos para los asaltos. La falta de vigilancia y las escasas denuncias por esos delitos, las convierten en el mejor sitio para el imperio de la impunidad.
Nada más en el 2015, se registró un aumento del 13%. De acuerdo con especialistas universitarios en autotransporte, es relativamente sencillo convertirse en víctima de algún ataque criminal en esas vías. Los atracos se concentraron en Guerrero, Tlaxcala, Puebla, Oaxaca, Chiapas, y Veracruz.
Pese a ello, las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública indican que entre 2013-2014 hubo una baja en la incidencia de robos en carreteras, para el 2015 reflejan un fuerte e incontenible repunte de asaltos a mano armada contra autos particulares, autobuses, y camiones de carga.
La estadística oficial reconoce cerca de 2 mil asaltos reportados, de los cuales más de 1,120 trata de autotransportes de carga, lo que al final de cuentas se carga en el precio al consumidor. No se escapan los automovilistas, ni los autobuses de pasajeros.
El costo financiero de los robos y asaltos, en forma directa, representan poco más de 1,200 millones de pesos anuales. Eso sin contar el número de personas muertas, heridas o violadas sexualmente. Esto sigue incrementándose. Y, de la policía, ni sus luces.
EN SUMA: Interjet, de Miguel Alemán, de ser una buena opción por sus bajos costos, el trato para los pasajeros es imperdonable. Abusos, retrasos y amenazas de empleados. Nadie puede meterlos en cintura.
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