Por Víctor Sánchez Baños

Para muchos de ustedes queridos lectores, es un lenguaje complicado el tema económico, pero especialmente el de las tasas de interés, que marca el Banco de México. Sin embargo,

La Junta de Gobierno del Banxico dejó sin cambio la Tasa de Interés Interbancaria a un día en 8.25 por ciento, pero aseguró que persiste riesgos al alza para la inflación y en el caso del crecimiento, se mantiene sesgo a la baja.

Las tasas de interés tienen como objetivo el dar un premio superior al inversionista o ahorrador, por tener su dinero en el banco con el mínimo de riesgo. Esa tasa de interés debe ser competitiva, especialmente para la inversión extranjera. Esto significa que debe estar ligeramente, o en algunos casos muy alta, en comparación a la que Estados Unidos paga a los inversionistas en Bonos del Tesoro.

Mantener sin cambio la tasa de interés implica la opinión de los especialistas en finanzas públicas, de un organismo totalmente autónomo al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en el sentido que si bien la inflación general y la subyacente (aquella que tiene una amplia gama de productos que tienen volatilidad) han aumentado, estiman que es transitorio. Optimista postura de Banxico.

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