Por Víctor Sánchez Baños
La UNICEF alertó sobre la indiferencia de los mexicanos ante un problema creciente: la orfandad. En México hay 1.6 millones de niños en orfandad, de acuerdo a ese organismo dependiente de la ONU y los recursos gubernamentales son casi nulos.
Una cifra que realmente es inquietante. Cientos de miles de niños mexicanos carecen de cuidados parentales, debido a diversas circunstancias como la migración de sus padres, por abandono, o a causa del crimen organizado. Todo ello implica que los niños queden al cuidado de abuelos, tíos o de algunas “almas samaritanas”.
Como en muchas ramas de la vida en el país no existen estadísticas, pero “estiman”, son bases específicas, que nada más por el narcotráfico han dejado en la orfandad a más de 400 mil niños. Para su atención no hay dinero gubernamental y parecen ánimas en pena que deambulan por las calles a merced de traficantes de seres humanos o víctimas de la drogadicción.
La organización Aldeas Infantiles SOS México cuenta con 412 mil 456 niños sin cuidado parental. Un solo organismo de la sociedad. El Censo de Alojamientos de Asistencia Social conoce de 879 casas hogar para menores de edad, en las que residen un total de 30 mil menores. Estos niños necesitan ser adoptados y que el gobierno destine recursos. Se despilfarra mucho en partidos políticos mientras estos niños, futuro del país, están abandonados.
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