• Obstinación por Texcoco y despilfarran en Tizayuca

Por Víctor Sánchez Baños

Todo está listo para el inicio de la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, donde se invertirán 11 mil millones de dólares, en una obra que estará concluida para el 2020.

El proyecto, es una belleza ideada por Fernando Romero y Norman Foster. Muchos la critican por ser un gran “mall” o centro comercial, pero pocos reparan en otro daño colateral: el cierre del aeropuerto militar de Santa Lucía, en el municipio de Zumpango, Estado de México, que gobierna Eruviel Avila.

Se cancelaría la segunda pista de aterrizaje más grande de México, después de la del aeropuerto de Toluca, misma que está construida en instalaciones militares, con la más sofisticada tecnología e ingeniería en aeropuertos. Esa pista quedaría abandonada al igual que los terrenos que ocupa el actual aeropuerto civil, en la delegación Venustiano Carranza.

La base aérea de Santa Lucía, la Base Aérea Militar 1, quedará inutilizada lo que generará pérdidas superiores a los 850 millones de dólares. Ahora, usar esa base aérea no sería descabellado y los costos, sobre todo en la cimentación, disminuiría notablemente, ya que el edificarlo en donde está planeado representa un sobreprecio de más del 20% para luchar contra el terreno fangoso del Vaso de Texcoco.

EN SUMA.- El precio de producción en barril de crudo en Pemex, hoy es de 16 dólares; durante la administración de José López Portillo era de 1.40 dólares. Caray, compramos el circo y crecen los enanos.

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